La industria farmacéutica es uno de los poderes más potentes en la actualidad. En sus manos nos encontramos todos los seres vivos. Sin embargo, un chico de Maryland les enseñó que sí es posible cambiar el mundo y plantar cara al cáncer a corto plazo.
El invento de Jack Andraka consiste en un sensor que mide el nivel de mesotelina del paciente. Esta proteína, utilizada como marcador bioquímico, logra detectar el cáncer de páncreas en un estado temprano. Para realizar la prueba se necesitarán 5 minutos y su coste es 26.000 veces más barato que los procedimientos tradicionales, ya que cuesta unos 3 céntimos de dólar.
Este sistema de medición también es aplicable al cáncer de ovario y de pulmón, por lo que esta invención ha sido de gran importancia desde que se hiciera pública.
Jack ha recibido premios y reconocimientos de parte de la comunidad científica, mientras otro sector se muestra crítico y escéptico. ¿Es verdaderamente Jack un genio? Lo cierto es que la historia no es tal y como la cuentan. Si bien es cierto que Jack es un joven muy preparado, despierto e inteligente, el trabajo no lo hizo solo. La Johns Hopkins University, que colaboró con Andraka, está poniendo todo lo que está en su mano para lograr detectar el cáncer de manera temprana y de forma efectiva.
Además, la Thomas Jefferson University, la University of Delaware, la University of Michigan y la Jiangnan University ya habían publicado anteriormente estudios similares para la detección prematura del cáncer.