Algunas farmacias venden medicinas de contrabando
A la internación de fármacos de uso popular, como analgésicos, se suma un creciente mercado negro de drogas de primera generación, que son ofertadas por boticas y centros de salud privados. El control es pobre.
El contrabando de medicamentos en Bolivia ha encontrado en clínicas, farmacias e incluso hospitales públicos un espacio irrestricto de comercialización.
La venta de fármacos de uso común, como analgésicos y desinflamantes, en las ferias populares, es apenas una pequeña muestra de un mercado negro que se sostiene con la adquisición de drogas de primera generación y tratamientos avanzados, cuyos precios son muy elevados.
Dicha actividad no sólo representa una desleal competencia para las importadoras legalmente establecidas, sino que implica riesgos y perjuicios para la salud.
Jaime Mondaca, presidente de Insumos Médicos Esenciales (IME), explica que el “contrabando hormiga de fármacos” (internación de los productos en pocas cantidades) no sólo termina en ferias, sino en farmacias e incluso entidades de salud estatales.
“Nosotros vendimos a la Caja Nacional de Salud un lote de Efedrina, medicamento que se usa para Terapia Intensiva; fuimos los primeros en importar este producto al país, pero antes que entre al territorio legalmente, el insumo ya circulaba de contrabando y era adquirido incluso por instituciones del Gobierno”.
Un estudio de la oferta y demanda de drogas en Bolivia, realizado por el Centro de Promoción Bolivia (Ceprobol), indica que el 2005, la industria farmacéutica vendió un total de 17.569.257 medicamentos, de los cuales 15.825.110 pertenecían al mercado ético y 1.744.147 (11%) al contrabando, principalmente de Perú, Brasil, Argentina y Chile.
Según Christian Schilling, gerente Comercial de Laboratorios Inti, la compraventa de productos farmacéuticos legales genera un movimiento anual de cerca de $us 100 millones y el expendio de remedios ilegales alcanza los $us 30 millones cada año.
“El hecho de que los medicamentos de contrabando sean vendidos en clínicas privadas y hospitales públicos de todo el país se debe a que el precio del fármaco es más barato que el de las importadoras”, asegura Schilling, quien también acusa a algunas farmacias de ser cómplices.
“Una anécdota tristemente chistosa es que a veces las farmacéuticas adquieren contrabando y nos lo quieren devolver como si el producto los hubiéramos suministrado nosotros; en Inti nos ha pasado”, señala.
Un agente del Centro Operativo Aduanero (COA) que pidió el anonimato, menciona que esa institución detectó redes de contrabando “hormiga” de fármacos.
“Son tres o cuatro personas que sólo ingresan medicamentos de contrabando. Utilizan vías alternativas y llegan a una especie de almacenes en El Alto, dos en la 16 de Julio y uno en Villa Dolores. Desde ahí distribuyen su mercadería, pero lo peor es que los fármacos no tienen las condiciones necesarias para su almacenamiento y pueden ser dañinos en vez de curativos”.
No obstante, el mercado negro de productos medicinales tiene también otros mecanismos de internación, menos masivos y más lucrativos, es decir, de mercadería especial y muy costosa, que las clínicas y farmacias ofertan a los pacientes, según coincidieron los entrevistados.
Delia Villarroel, responsable del área de Vigilancia y Control de la Dirección Nacional de Medicamentos (Dinamed), asegura que las drogas pueden sufrir alteraciones en su composición por la forma de almacenamiento.
“Se ha detectado que se comercializa un medicamento llamado Albúmina Humana sin garantía de conservación, que ha causado la muerte de un paciente en la ciudad de Santa Cruz; una farmacia hizo la venta”.
Villarroel revela, además, que cuando las entidades lanzan una licitación pública para la compra de fármacos, la póliza de importación de los productos no es un requisito. “Podría ser que las empresas entreguen mitad de su mercadería ingresada legalmente y mitad de contrabando”.
Según Mondaca, un funcionario de la Aduana le aseguró que “la mayoría de las importadoras de fármacos ingresan legalmente, como máximo, la mitad de su stock”. William Rivera, jefe de Ventas de Laboratorios Tecno Pharma, expresa que la reciente proliferación de importadoras de medicamentos tiene una estrecha relación con el contrabando.
ALGUNAS DEFINICIONES
Producción Nacional • Insumos elaborados por industrias farmacéuticas de Bolivia. Existen 23 industrias en el eje central del país, cuya producción representa el 40 por ciento del total del mercado farmacológico nacional.
Importación • Compra legal de medicamentos del exterior e introducción de los mismos por la Aduana, realizado por aproximadamente 147 empresas, entre nacionales y extranjeras, que cubre el 60 por ciento del mercado.
Medicamentos ilícitos • Fármacos falsificados, adulterados y de contrabando. Según un estudio de Ceprobol, provienen de Perú, Brasil, Argentina y Chile. Representan aproximadamente el 30 por ciento del mercado.
Póliza de importación • Documento que respalda la compra legal de productos farmacológicos, el pago de los respectivos impuestos por el ingreso de la mercadería al país y su posterior desaduanización.
La Razon, 22 d Junio 2008